Entrenamiento en ayunas

Se trata de un tema que tiene mucha controversia y no existen conclusiones claras al respecto, pero podemos decir que no se trata de una respuesta drástica, sino que entrenar en ayunas dependerá del tipo de entrenamiento, tu objetivo y tus características físicas.
Diversos estudios han demostrado como, lógicamente, aquellos que entrenaban resistencia en ayunas bajaban más peso que aquellos que comían antes del entrenamiento. En este caso debemos tener en cuenta el efecto rebote y el hambre con el que podemos llegar a la comida tras entrenar, que puede producirnos el efecto contrario.
Por lo tanto, respecto al peso parece tener alguna ventaja, pero ¿qué sucede respecto al rendimiento?
Este mismo estudio concluyó que los sujetos que comían antes de entrenar mejoraron su VO2máx. , mientras que aquellos que ayunaban no.
Esto nos lleva a plantearnos cuál es nuestro objetivo. Si acudes con frecuencia al gimnasio y tu objetivo es aumentar masa muscular, ayunar no te ayudará a conseguir tu objetivo, pues necesitarás comer con frecuencia y por supuesto antes de entrenar.
Si tu objetivo es prepararte para una prueba de resistencia de larga duración, quizás puedas incorporar algún entrenamiento semanal en estado de baja energía ayunando con el objetivo de ser más eficiente en la quema de grasa y más ahorradores en el consumo de glucógeno muscular.
Si únicamente quieres ponerte en forma y mantener tu peso, no deberías utilizar el ayuno, pues necesitas energía para sentirte activo y mejorar tus capacidades.
Si personalmente eres una persona que te deja muy fatigado entrenar en ayunas, tienes malos hábitos alimenticios, eres diabético, embarazada, una persona con tendencia a la hipoglucemia o una persona joven lo mejor será que comas antes de hacer ejercicio.